Franchesca Samper .
Terapeuta FLORAL® en flores de Bach nº BA0410A
terapeuta FLORAL® en flores de California nº CA0603H
terapeuta FLORAL® en BUSH(Australia) TF nº Bs0809G
Terapeuta en orquídeas Machu Pichu nº Mp0907J
Practitioner en Eneagrama y terapias energéticas nºEn1001N
Santiago de la Ribera (ESPAÑA).
Las fotografías que expongo en las descripciones de las flores y en el apartado"Mis fotos favoritas",son realizadas por mí.
Querida Franchesca, Paquita, amiga: veo como tu blog va caminando, con esas maravillosas fotos de flores que tú misma tomas en todos los lugares a donde vas, con tu cámara siempre preparada para sorprender la belleza y sus propiedades sanadoras. La belleza que encierran las pequeñas y humildes violetas, ya sean las salvajes de Riopar o las cultivadas de tu jardín, fue puesta en música por Mozart en un hermoso lied titulado "La violeta" (Das Veilchen, de 1785, con texto de Goethe: "En el prado había una violeta plegada sobre sí e inadvertida; era una graciosa violeta..." Una pastorcita pasa por el lugar y la violeta desea ser la más hermosa y vistosa flor para la muchacha, que, inadvertidamente, la aplasta. "Muero, sí, pero muero por ella y asus pies". En la partitura, Mozart añadió de su puño, dos versos a los del poeta: "Pobre violeta. Era una violeta con un corazón muy grande.." Espero que esto amplíe desde otro punto de vista, el conocimiento de las flores. Muchos besos. Mª Dolores
Querida Franchesca, Paquita, amiga:
ResponderEliminarveo como tu blog va caminando, con esas maravillosas fotos de flores que tú misma tomas en todos los lugares a donde vas, con tu cámara siempre preparada para sorprender la belleza y sus propiedades sanadoras.
La belleza que encierran las pequeñas y humildes violetas, ya sean las salvajes de Riopar o las cultivadas de tu jardín, fue puesta en música por Mozart en un hermoso lied titulado "La violeta" (Das Veilchen, de 1785, con texto de Goethe:
"En el prado había una violeta
plegada sobre sí e inadvertida;
era una graciosa violeta..." Una pastorcita pasa por el lugar y la violeta desea ser la más hermosa y vistosa flor para la muchacha, que, inadvertidamente, la aplasta. "Muero, sí, pero muero por ella y asus pies".
En la partitura, Mozart añadió de su puño, dos versos a los del poeta: "Pobre violeta. Era una violeta con un corazón muy grande.."
Espero que esto amplíe desde otro punto de vista, el conocimiento de las flores. Muchos besos. Mª Dolores